1001 Albums Parte XLV: Marianne Faithfull, The Slits, Costello, N. Young, Gang of Four, Cheap Trick, Fleetwood Mac, Pink Floyd, Public Image, Michael Jackson (1979)

14.08.2022

Considerado por la propia Marianne Faithfull como su "obra maestra", Broken english (1979) es un interesante racconto de estilos e ideas musicales. La tonalidad áspera de la voz de Faithfull es audible desde el primer tema -"Broken english"-, una pista rocker con una buena base tecno de sintetizadores y efectos especiales. Le sigue "Witches' song", un canto new wave a la adrenalina y también a la esperanza y resiliencia, a esa necesidad de seguir adelante ante todo, el blues "Brain drain" que repasa las consecuencias negativas de malas relaciones y adicciones, "Guilt" (una autocrítica con cierto dejo masoquista), y el cover "The ballad of Lucy Jordan", una melancólica y triste aventura con base electro y una voz quebradiza pero totalmente emotiva; sólo por este tema el disco vale la pena. "What's the hurry?" acerca a Faithfull al estilo cándido de Debbie Harry -aunque sin la energía de ésta-, "Working class hero" tiene poco de lo melódico de Lennon (su intérprete original) y más de rebeldía y desgarro, y "Why'd ya do it" se apoya en un poema del inglés Heathcote Williams y le imprime un aura de rock británico emparentado con los Stones, siendo éste el tema más influenciado por su relación con su ex Mick Jagger, como también la canción más autobiográfica del disco. A pesar de no brillar del todo en las interpretaciones, Faithfull le otorga una impronta que hace de Broken english algo muy especial.

Favoritas: "The ballad of Lucy Jordan", "Witches' song", "Why'd ya do it"

Calificación:  8/10


Cada tanto, entre virtuosismo y elaboración, aparece un disco como Cult (1979), álbum debut de la banda inglesa punk The Slits. Con una formación de mujeres, sentó las bases para el verdadero post-punk urbano que bajó definitivamente la cortina al punk sucio y rebelde de los 70'. Con un estilo más crudo y menos trabajado que otras bandas, The Slits se centraron en promover una movida que supere el punk recio de la década que terminaba -a pesar de ser ellas mismas cercanas a bandas como Sex Pistols o The Clash-, y para ello vincularon al género con otros estilos; así, temas como "Spend, spend, spend" era una combinación de punk y reggae y una crítica al consumismo, otros tenían un sonido bastante funky ("Instant hit", "So tough", "Ping Pong affair" -de geniales guitarras- y especialmente la graciosa "Shoplifting", que gracias a sus estridentes agudos situó a Ari Up como una temprana influencia vocal para Björk), mientras que también se asociaban al new wave ("FM") y brindan tributo al punk que se iba con "Love und romance", poco sentimental y mucho más sexual. "Newtown" es un reggae peligrosamente alegórico -en relación a las drogas- aunque musicalmente contagioso, "Typical girls" entusiasma por su alegre melodía de piano, "Adventures close to home" es desordenada pero a la vez un canto a la autosuficiencia y liberación femenina, y el bonus "I heard it through the grapevine" tiene un sonido dub y un juego vocal de Ari muy pegadizo. La audaz tapa me remite a las poderosas guerreras amazonas, lo que no es poco. De ninguna manera sólido, pero absolutamente divertido. Un disfrute. 

Favoritas: "Shoplifting", "So tough", "Newtown"

Calificación:  7/10


Armed forces (1979) fue la tercera entrega de Elvis Costello con su banda The Attractions, y no resultó un trabajo especialmente innovador; de hecho, se lo considera como 'sin evolución alguna' y con un sonido más comercial. Sin embargo, Armed forces contiene buen pop, relajado y melódico. El trabajo con los arreglos es bueno, fresco y aún hoy es perfectamente audible. La indiferencia provocada por la minimalista "Accidents will happen" se subsana con "Senior service", divertida recreación del estilo Bowie y con un elegante teclado que remite a ABBA; "Oliver's army" es el posicionamiento de Costello como anti-racista y anti-belicista (o anti-imperialista), aunque la frase 'white nigger' le jugó una mala pasada. "Big boys" busca desmantelar la figura del machismo que se conseguiría al tener una novia, un repetitivo loop de sintetizador carga "Green shirt", tema que estudia la paranoia en la pareja, y "Party girl" es una balada algo contradictoria pero que suena bien. El áspero pop rock de "Goon squad" -que podría referirse tanto a la milicia como a la adultez misma- se combina bien con "Busy bodies", un tema pop a los Beach Boys que comenta la relación de las personas con el consumismo y el materialismo; la crítica se extiende hacia la aburrida y monótona sociedad inglesa en "Sunday's best" -en una melodía de vals-, la funky "Moods for moderns" habla del fin de una relación, y los dos últimos temas ("Chemistry class" y "Two little Hitlers") juega con la relación entre el amor y la política, los dos grandes ejes del álbum. Aunque irreverente y claro, el disco adolece de cierta monotonía. Igual no está mal. 

Favoritas: "Oliver's army", "Party girl", "Chemistry class"

Calificación:  7/10


Neil Young puede considerarse como un sobreviviente de la escena musical de los 70'. Proveniente del palo del folk de los 60', Young atravesó con idas y vueltas esta década para mantenerse pese a las variaciones musicales que se produjeron, desde el heavy metal y el punk hasta el disco y el new wave. En este contexto, el artista canadiense lanzó Rust never sleeps (1979), una experiencia compartida con su banda de muchas tocadas, Crazy Horse; este proyecto se compuso de canciones de estudio pero también de temas en vivo. Dicha combinación le da un toque de ambientación especial. "My my, hey hey" se hizo célebre por ser citada en la nota suicida de Kurt Cobain ("It's better to burn out than to fade away"); "Thrasher", de hermosa melodía, es una melancólica revisión de sus épocas con Crosby, Stills y Nash. "Ride my llama" es anecdótica y adolece de un sonido algo deficiente por ser en vivo, la balada "Pocahontas" es un comentario punzante sobre la colonización americana y el despojo a los nativos de las tierras, y "Sail away" es un bella balada country que lo entrega todo a la esperanza de un mañana. "Powderfinger", balada rocker, parece un epitafio al folk rock, pero también una estilizada manera de disparar nihilismo a la medida de una década que llegaba a su fin; "Welfare mothers" impacta por su sonido potente y eléctrico, incluyendo coros sinfónicos, al igual que "Sedan delivery" (alusiva al tráfico de drogas), y "Hey hey, my my (into the black)" parece anticipar el grunge de más de diez años después. Young realmente sabía cómo explorar estilos... buen disco aunque algo corto y desparejo.

Favoritas: "Thrasher", "Sail away", "Powderfinger"

Calificación:  7/10


Varias cuestiones llaman la atención tras la lectura del apartado dedicado a Entertainment! (1979), álbum debut de la banda de Leeds Gang of Four. Por un lado, su acertada definición de ésta como una banda funk "neo-marxista", desde la alusión de su nombre (en referencia a la facción china revolucionaria) y contestataria. El sonido es definitivamente funky y libertario, desde la primera canción -"Ether"-, pero tiene sus momentos de post-punk como con "Natural's not in it" y "Return of the gift" (acérrimas en la crítica de las comodidades y los bienes de lujo), "At home he's a tourist" (contra el ritmo de vida del obrero), "Not great men" -la cual cuestiona la Teoría del Gran Hombre y postula que la verdadera historia está en los hombres de acción- o "I found that essence rare". La punky "Damage goods" sobrepone el deseo carnal por encima del amor y es una crítica de las políticas sexuales del momento, "Guns before butter" es reaccionaria contra la postura estática británica (Thatcheriana), "Glass" recoge el sonido de brit rock y describe la actualidad con pesimismo, mientras que "Contract" y "Love like Anthrax" despotrican contra el rol de las mujeres en la sociedad. Protesta en grandes dosis, culto a un régimen no tan ejemplar como ellos pensaban (oír "5.45"), y una voz principal que por momentos se hace chillona. Aunque movido, no del todo satisfactorio. 

Favoritas: "Natural's not in it", "Contract", "Damage goods"

Calificación:  6/10


Aunque estrenado en Japón en 1978, At Budokan (1979) llegó al mercado de occidente al año siguiente. El álbum testimonia las presentaciones de la banda de power pop estadounidense Cheap Trick durante una gira por el país del sol naciente. Tras el inicio fugaz pero enérgico de la hard rock "Hello there", el disco sigue con "Come on, come on", de tono más cercano al brit pop y privilegiando aprovechar la frescura del momento presente. "Lookout" denota las típicas letras románticas y enamoradizas de la banda, al igual que la metalera "Big eyes". "Need your love" tiene una duración extensa que permite pasar de un nivel a otro y lograr un climax; recuerda en parte a "I want you" de los Beatles. El cover de Fats Domino "Ain't that a shame" recupera la energía rocker del primero y le otorga un sello propio de la banda que lo hace más potente. Algo de rockabilly queda en "I want you to want me", éxito rotundo en Japón e influencia poderosa en el power pop asiático; "Surrender" destaca el cambio generacional con guiño a Kiss incluido, y "Goodnight" -para interactuar con el público- funciona muy bien como polo opuesto del primer tema. "Clock strikes ten" es un homenaje a las salidas del fin de semana y posee algo del espíritu del rock and roll original. Interesante, con mucha fuerza e intensidad. Siempre elogio las portadas, pero esta vez podría haberse elegido una mejor postal. 

Favoritas: "Come on, come on", "Ain't that a shame", "Lookout"

Calificación:  7/10


Aunque a Fleetwood Mac les resultó imposible igualar el éxito rotundo que supuso el álbum Rumours, Tusk (1979) es una obra monumental en términos de tonalidad y de duración. Algo más cerca del pop rock melódico ("Over & over"), la banda entregó un trabajo sofisticado y un nivel de arreglos superior a sus anteriores discos, siendo comparado incluso con el álbum blanco beatle. Sin embargo, el sonido folk persistió, como lo atestiguan "The ledge", "What makes you think you're the one", "Honey hi" -de buena percusión y elogiosos coros- o "That's enought for me". Hay rock&roll sólido como en "Think about me" (un choque entre Beatles y Lou Reed) o la rítmica "I know I'm not wrong", melodías pastorales idílicas -"Save me a place", "That's all for everyone" y "Never make me cry"- . "Sara" tiene múltiples interpretaciones, pero lo cierto es que es un tema pop sentido y muy armónico; "Storms" es una balada sobre la separación y abandono, cargada de emotividad, "Not that funny" se sube a la new wave (al igual que la dulce "Angel" de Stevie Nicks) con un sonido pegadizo de garage, y la rockera "Sisters of the moon" suena onírica y la guitarra destaca como un lamento. "Brown eyes" es como un blues rock y resulta muy climática, "Beautiful child" es una hermosa balada cargada de nostalgia por los años perdidos, en la bella "Walk a thin line" se reconoce el excelente manejo de armonías, "Tusk" demuestra el grado de experimentación buscado por la banda y "Never forget" cierra con positivismo y también tranquilidad. Otro gran disco de esta gran banda. 

Favoritas: "Save me a place", "The ledge", "Beautiful child"

Calificación:  8/10


The Wall (1979) es sin ninguna duda uno de los grandes álbumes conceptuales del siglo XX. Homenajeado y retomado hasta el cansancio, ha influenciado a muchos artistas y ha generado también cierta apatía por el grado de alienación que expresa -algo, por otra parte, típico y esencial para la filosofía de Pink Floyd. El decimoprimer álbum de estudio de la banda gira alrededor de la idea distópica de un músico que, cansado de la hipocresía ("Don't leave me now", "Bring the boys back home") y desilusionado con el mundo de la música ("Young lust") delira progresivamente con que se ha vuelto un líder fascista ("The show must go on", "In the flesh"); en la figura del protagonista se concentran el abandono ("Is there anybody out there?") y el aislamiento ("Nobody home") y lo que ello puede provocar en alguien cuya vida parece perder sentido. El muro del título -apenas franqueable- es lo que divide al protagonista del mundo exterior. Musicalmente es un disco elaborado, una ópera rock que va desgranando diferentes matices para señalar los estados de ánimo del sujeto. La historia se va desarrollando de manera lineal por medio de las canciones, que son muchas para comentarlas a todas (es un disco doble) pero con cuya sucesión nos damos una idea cabal de cómo el sujeto se hunde más y más en su mundo interno ("Waiting for the worms"); basta con mencionar el enorme éxito de temas como "Another brick in the wall" o "Comfortably numb" para entender el alcance de la obra. A lo largo del álbum vamos aceptando la devastadora contundencia con la que se nos sumerge en la historia: por momentos depresivo ("Mother"), por otros algo oscuro ("Run like hell") o tétrico ("Empty spaces"). Aunque no enteramente original (Tommy?), es un álbum poderoso que dejó huella. 

Favoritas: "Hey you", "The thin ice", "Another brick in the wall, Pt. 2"

Calificación:  9/10


Con una presentación que transmite una sensación de materialismo y de hermetismo (el disco venía en una caja de metal, literalmente), Metal box (1979), segundo álbum de Public Image Ltd., irrumpió como una abanderada de la música experimental post-punk de los años por venir. Su sonido es claustrofóbico, agotador e hipnotizador. "Albatross" es un tema de más de diez minutos que deja una tremenda sensación de agobio, "Memories", de onda new wave, parece oscilar entre muy pocas notas -lo cual genera sensación de repetición y sinsalida-, y "Swan lake" tiene un toque disco-funk y alude a Tchaikovsky en la melodía de la guitarra. "Poptones" (sobre una chica secuestrada por unos maleantes) produce una suerte de eco asfixiante, mientras que "Careering" suena pesimista y de nuevo apela a la sensación de que no hay escape de la civilización; "No birds" entusiasma por su pulso y hasta cita a Keats, "Graveyard" es una entusiasta toma instrumental con una guitarra que provoca sobresaltos, "The suit" involucra cierto bullying que hace parecer odiosas las expresiones del cantante, "Bad baby" sería un tema que eyectaría del asiento si no fuera por su lastimosa interpretación, y el medley final destaca por su sonido limpio y enérgico. Entiendo que el estilo fue innovador, influyente y que cambió varias cosas en la música industrial, pero honestamente no fue un disco de mi agrado, por la falta de melodías que me entusiasmen y por lo poco que me gustaron las voces. 

Favoritas: "No birds", "Socialist", "Memories"

Calificación:  5/10


Al momento de producir su quinto álbum como solista, para Michael Jackson el éxito individual todavía se le había negado en su totalidad. Si bien la fama ya lo había alcanzado tras destacar como prodigio infantil en el proyecto musical familiar Jackson 5, hasta 1979 el logro en los singles de alguna manera se le estaba negando. Para Off the wall (1979), Michael dejó todo en manos del veterano Quincy Jones, recordado hoy como el principal artífice de su rotundo éxito solista. Además de contar con canciones compuestas por talentos de primera clase, la combinación de funk, soul, pop, disco y balada resultó un combo mortífero que fue muy bien aprovechado por el enorme talento del artista. Luego de un arranque funky a todo trapo con "Don't stop 'til you get enough" (potenciando el falsete de Jackson), el mood cambia totalmente con la seductora balada disco "Rock with you"; la funky "Workin' day and night" suena a vehículo perfecto para el cantar rítmico y pausado de Michael, y junto a otros como "Get on the floor" y "Burn this disco out" te impelen a saltar del asiento y acompañar el contagioso sonido que llega a tu oído y dispara el meneo incesante del cuerpo (este es incluso el tema de "Off the wall", disfrutar del baile). Bajo el puño de McCartney, "Girlfriend" es una balada pop a tono con la adolescencia, "It's the falling in love" un tema soul apto para variaciones interesantes en la voz, "She's out of my life" es un lento sólido sobre una ruptura y "I can't help it" un experimento en clave de jazz (lo que probaba la aptitud de Michael para otras armonías). Tremendo salto de calidad y anuncio de lo que estaba por venir...

Favoritas: "Rock with you", "Workin' day and night", "She's out of my life"

Calificación:  8/10

Es mejor mirar al cielo que vivir en él. 
(Truman Capote)
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